Cáncer y pérdida del pelo

Durante el procedimiento, de quimioterapia y de radioterapia, se produce la caída del cabello del paciente. Es por esta razón, que existe una relación entre el cáncer y pérdida del pelo. Siendo considerada la respuesta directa a dichos tratamientos. Esta reacción es denominada alopecia, en este caso es inducida por el cáncer. Al concluir el proceso, el cabello vuelve a crecer, aproximadamente de 3 a 6 meses después.

Por lo tanto, la pérdida de pelo por quimioterapia, no es permanente. Al regenerarse el cabello, puede presentar algunos cambios, como su forma, grosor o color. En el caso de la radioterapia, si se presenta una alopecia irreversible. Esto sucederá, si el tratamiento ha sido muy agresivo, y el folículo fibroso se ha visto afectado, dificultando su función. A lo largo de este post, se profundizará sobre dicho tema, abarcando cada una de las fases del cáncer y la pérdida de pelo.

Cáncer y pérdida de pelo ¿Por qué se produce?

Se debe tener en cuenta, que el cabello cumple con distintas etapas a lo largo de su vida. Abarcando en ellas, el crecimiento, descanso y la caída del mismo. Al momento, de caerse el cabello, el área queda despoblada. Por eso es natural, que, al momento de llevar a cabo el tratamiento para el cáncer, se presente dicho síntoma a nivel capilar. Existen casos, donde también se pierde el pelo de las pestañas, cejas, zona púbica, axilas, y otras áreas del cuerpo.

Por esta razón, es que se habla de una relación entre cáncer y calvicie. Dado que, varios medicamentos de la quimioterapia, pueden generar la caída del cabello. Dependiendo de su dosis, puede presentar variaciones en los efectos. Desde un debilitamiento de las hebras, hasta la calvicie completa. Es importante destacar, que son pocos los casos, donde la pérdida de cabello por radioterapia es permanente.

Relación entre cáncer y pérdida de pelo ¿Vuelve a crecer al haber recibido quimioterapia?

La relación entre cáncer y pérdida de pelo, no es un indicativo, de que el cabello no pueda volver a crecer. Al concluir el tratamiento, pueden pasar algunas semanas para que el cabello comience a recuperarse y crecer de nuevo. Se debe tener en cuenta, los cambios que puede presentar el cabello al regenerarse, sin embargo, esto suele ser temporal. Las variaciones de texturas o de color, solo durarán hasta que las células encargadas del control del cabello, puedan funcionar.

Cáncer y pérdida de pelo ¿Cómo podemos prevenir el desprendimiento?

En la actualidad, no existe un tratamiento que evite la relación entre el cáncer y pérdida de pelo. Pero, esto no quiere decir, que no existan formas en donde se pueda prevenir la caída del cabello. A pesar, de que ninguno ha presentado una completa efectividad, pueden tenerse en cuenta durante el tratamiento. Entre ellos se encuentran, los gorros de enfriamiento, los cuales disminuyen el flujo de sangre. Presentando cierta efectividad al momento de usarlos.

Asimismo, el uso de minoxidil, durante el procedimiento, no significa que el cabello no se caerá. Pero, algunas investigaciones han demostrado, que, al aplicarlo, podría generar un crecimiento de cabello más rápido. Todavía se encuentra en estado de prueba dicha opción.

¿Qué hacer antes del tratamiento para evitar la relación entre cáncer y pérdida de pelo?

Aunque, el cáncer y pérdida de pelo, no pueden ser completamente evitados, se pueden tomar en cuenta, algunas formas de tratarlo. Por esa razón, antes de recibir el procedimiento y seguir estos pasos, se puede disminuir el nivel de estrés y frustración. Los cuales, son respuestas a la pérdida de cabello. Asimismo, se debe ser amable con el cabello, evitar decoloraciones o tratamientos permanentes, que puedan dar como resultado, su debilitamiento.

Durante el proceso, se recomienda cortar el cabello, esto permitirá, que el pelo pueda verse más abundante. Y a su vez, evitará que se note la caída del mismo. Por último, se puede planificar, como se cubrirá el cabello, empleando para ello, pelucas, bufandas u otros elementos. Esta opción, es si la persona, desea cubrir por completo dicha pérdida, o sustituirla en el caso de usar pelucas. Su objetivo, es hacer el proceso más cómodo, al recibir el tratamiento.

¿Qué se debe tomar en cuenta durante el tratamiento?

Al momento, en que el cáncer y pérdida de pelo se hacen presentes, durante el proceso. Se deben tomar en cuenta distintos factores, para que, posteriormente, pueda volver a regenerarse más saludable. A pesar, de saber las consecuencias, que tiene el tratamiento de cáncer en el cabello, esté se debe seguir cuidando. Cuando el proceso inicie, se pueden continuar usando productos, pero disminuyendo el lavado, solo para cuando sea necesario.

Una de las consideraciones, al momento del tratamiento, puede ser el afeitar la cabeza, esta decisión puede venir por molestias. Ya sea por picazón, irritación o sensibilidad del cuero cabelludo, durante la caída del cabello. Esta decisión, puede reducir estas molestias. Es importante, proteger la cabeza, tanto del frio, como del calor. Al presentar, tanta sensibilidad en esta zona, el frío o el sol pueden llegar a irritarlo. Siempre, se debe cubrir la zona para protegerla.

¿Qué se debe hacer al concluir el tratamiento?

Cuando ya se ha completado el proceso, y el tratamiento de cáncer y pérdida de pelo ha cesado. Los cuidados realizados durante toda esta etapa, se deben mantener, el cabello se debe continuar cuidando con suavidad. El cabello nuevo que empieza a crecer, presentará mayor fragilidad y será mucho más vulnerable al daño generado por productos. Por eso, se debe dejar crecer al natural durante un periodo, evitando el uso de decolorantes o tintes. Los cuales, podrían irritar la zona.

Al concluir el tratamiento, se debe tener mucha paciencia, el proceso de crecimiento no se dará de un momento a otro. Su crecimiento, se dará lentamente, siendo un proceso donde la paciencia será siempre el punto clave para tener resultados a futuro. El reparar los daños recibidos por el proceso del cáncer, no es fácil. Para esta etapa, también se da la opción de continuar usando sombreros o pañoletas para cubrir dicha zona. Hasta que la confianza pueda ser recuperada.